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lunes, 15 de junio de 2009

Las Relaciones de Parentesco II


Durante el mes de mayo, mi tiempo para este blog quedo eclipsado; motivado por aquellas obligaciones que son propias, al compromiso familiar.

Meditando en si debía, o no, continuar con el tema de las relaciones de parentesco, sentí acertado escribir sobre algunos aspectos del todo interesantes.

Los lazos de consanguinidad son notables en ciertas sociedades, sirvan en adelante algunos ejemplos.

Uno de los pueblos con las cotas más altas de consanguinidad, es el pueblo nipón donde los matrimonios de conveniencia entre primos carnales, ha sido un hecho común.

En la década de los sesenta, estudios realizados en el sur de la India, revelaban que más de la mitad de los matrimonios celebrados entre los sadras de Andhra Padresh, se celebraban entre primos carnales; y que la proporción de uniones entre tíos y sobrinos podría llegar hasta un 12% de la población.
Cada vez que se casan dos primos, ocurre una duplicación en las genealogías de sus descendientes.

Cuanto más atrás en el tiempo se remonte la genealogía de una persona, más alta será la tasa de duplicación, hasta que finalmente, cuando comienza a predominar el matrimonio entre primos, cesa de extenderse.

Uno de los pueblos mejor estudiados, con un alto índice endogámico, es el pueblo Amish.

Existen numerosos estudios al respecto que revelan, que las relaciones de parentesco quedan establecidas en un 31%, en grados de primos carnales, o consanguíneos de 3º y 4º.

El precio de la endogamia de los amish ha sido la aparición, más de lo normal, de enfermedades tales como el albinismo, dos tipos recesivos de enanismo, el cretinismo agoítrico, distrofias musculares de los miembros, esclerosis lateral, y neurofibromatosis.

Como resultado de esto esta comunidad ha mostrado un gran interés en las enfermedades hereditarias. Un estudio "Medical Genetic Studies of the Amish" , cuyo autor Victor McKusick, revela aspectos muy interesantes al respecto.

Si entendemos el devenir del ser humano en la historia de la humanidad, grato es intentar reconocer la mixtura de orígenes, pueblos y culturas, en nuestro pasado, el de nuestros ancestros.

1 comentario:

  1. Hola, Iñaki. En mi blog http://www.genbriand.blogspot.com he publicado un artículo afín a éste, que se llama "Matemáticas y Genealogía". Dado el resultado matemático de los datos, es inevitable que exista endogamia en la reproducción del ser humano cuanto más atrás viajamos en el tiempo. Recuerdo una anécdota de mi infancia: yo estudié en el Colegio de los Hermanos Marianistas, en Bs. As. En la clase de Religión, en 3er grado, le pregunté al maestro cómo se había reproducido la raza humana, si en la leyenda del Génesis sólo estaban Adán, Eva y Caín. El pobre hombre intentó dar respuestas dignas, pero la clase se quedó un poco alarmada por la pregunta. Pues sí, somos, de todas maneras, por vía de creencia religiosa o de evolución darwinista, hijos del incesto, de todas formas. En las antiguas pequeñas aldeas europeas, no lo dudes, todo el mundo estaba, de una manera u otra, emparentado. Adónde iban a conocer alguien para casarse sino en las fiestas del pueblo, en una época (siglos XVI ó XVII, por ejemplo), donde los caminos escaseaban y los transportes eran difíciles?
    Saludos
    Pablo.

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